lunes, 29 de febrero de 2016


El aumento de la gasolina

Por fin llegó el aumento de la gasolina. Lo que no se atrevió a hacer Hugo Chávez (tal vez porque no le faltaron recursos), lo hizo Nicolás Maduro. El aumento asombra: 6.567% (tomando en cuenta el nuevo precio de la gasolina de 95 octanos). Sin embargo, seguimos teniendo la gasolina más barata del planeta.

 

Ahora vender gasolina, ¿le da ganancias a Pdvsa?

Según el Ministro Rodolfo Del Pino, a Pdvsa le cuesta Bs. 1,87 producir un litro de gasolina. Esto significa que un barril de gasolina le cuesta Bs. 297,33. Por otra parte tenemos la información suministrada por Pdvsa con respecto a las ventas de gasolina que se han realizado días después del aumento y la proporción del tipo de gasolina (octanaje) que se ha comercializado.

 

Tabla N°1

  

 

 
 
 
 
 
El cuadro nos brinda informaciones lógicas:

1-    ocurre un desplazamiento del consumo de gasolina de 95 octanos a 91 octanos (efecto precio).

2-    los volúmenes de venta se mantienen inalterados, el consumo de gasolina en Venezuela es inelástico al precio (no hay sustitutos de calidad en el transporte y el nuevo precio de la gasolina se mantiene bajo, cosas que siguen incentivando su consumo).

Teniendo todos estos datos, podemos calcular el ingreso que estaría recibiendo Pdvsa y también la ganancia, partiendo de los números del Ministro Del Pino.

En la tabla N°2 presentamos esos cálculos.

Tabla N°2



 




En la Tabla N°2 presentamos tres escenarios, donde la variable diferenciadora es el precio de venta por litro de gasolina (un promedio ponderado entre lo de 91 y 95 octanos). En los tres escenarios el nuevo precio de la gasolina le genera ganancias al país.

Nuestro escenario base en el número 3, en el cual el consumo de 91 es el 45% del total, por lo tanto le precio promedio ponderado de venta es de Bs. 3,75/litro. En ese escenario, Pdvsa recibiría una ganancia total anual de casi Bs. 29.000 millones. ¿Contra qué podemos comparar esa cifra para tener una aproximación del impacto de la medida para las finanzas de Pdvsa?, en principio se nos ocurrió contrastarla con la ayuda que BCV le hizo a Pdvsa en el año 2015. Esta ascendió a Bs.202.553 millones, por lo que Pdvsa podría estar recaudando por el aumento de la gasolina un 14% de ese monto.

Pero tenemos un problema: Pdvsa NO recibirá un solo bolívar por el aumento de la gasolina. Los ingresos que genere alimentarán un Fondo que el gobierno ha dicho servirá para los planes de Grandes Misiones.

 

¿De verdad cuesta Bs. 1,87 el litro de gasolina?

En los informes financieros de Pdvsa de 2014 (son los últimos que la estatal ha publicado) se reporta un costo de producción de petróleo de $18/b. Además tenemos que la tasa de cambio con la cual Pdvsa presentó sus balances fue de Bs. 20/$.

Sin tomar en cuenta el costo de convertir el petróleo en gasolina, tenemos que producir un litro de petróleo para Pdvsa en 2014 le costó el equivalente de Bs. 2,26. ¿Cómo es posible que para 2015 le cueste más barato a Pdvsa producir gasolina que petróleo en 2014?

Para llegar a la cifra que informa el Ministro, Pdvsa tendría que tener para 2015 un costo de producción del barril de gasolina cercano a $15 (suponiendo además que tiene la misma tasa de cambio que en 2014).

Resulta difícil pensar que los costos de producción de Pdvsa estén bajando, tomando en cuenta que buena parte de la producción petrolera nacional se concentra en la Faja Petrolífera, donde los costos evidentemente son mayores. También es complicado el supuesto de la utilización de la misma tasa de cambio para 2015.

¿Y si Pdvsa sigue perdiendo dinero a los actuales precios de la gasolina?

En esta parte también partimos de 3 escenarios, pero la variable diferenciadora no es el precio promedio ponderado (ese lo estamos tomando de nuestro escenario base), sino lo será el costo de producir la gasolina y la tasa de cambio que utiliza Pdvsa (va desde Bs.30/$ a Bs. 50/$).

En la Tabla N°3 presentamos nuestros cálculos de estos nuevos escenarios:

 

 

 

En los tres el nuevo precio de la gasolina estaría por debajo del costo, con lo cual la comercialización de gasolina en Venezuela seguiría reportando pérdidas. Nuestro escenario base aquí es el N°6 con una pérdida de Bs. 87.415 millones, ya que consideramos que el costo de producción de un litro de gasolina debe estar cercano a Bs. 9,50.

 

¿Cómo sería el panorama con aumento y sin aumento?  

Comparemos como estaba el panorama (pérdidas) antes del aumento y como ha cambiado el mismo luego del aumento.

En la Tabla N°4 presentamos esa comparación:

 

Tabla N°4

 


 

 
 
 
A pesar de tener un incremento en el precio ponderado de 4161% (y por lo tanto en los ingresos), la pérdida en la comercialización de gasolina (según nuestros estimados) apenas habría disminuido un 39%. Pdvsa pasó de tener una pérdida de Bs. 143 millardos a una de Bs. 87 millardos.

 

Ideas Finales

1.     Debemos reconocer que fue una buena decisión aumentar el precio de la gasolina, sin embargo según nuestros cálculos, el aumento fue insuficiente. El aumento pudiera ser el punto de partida para realizar cambios importantes en política económica en Venezuela, sin embargo estamos convencidos que esto solo fue una acción aislada.

2.     Hoy Pdvsa sigue perdiendo dinero por la venta de la gasolina. El aumento apenas disminuyó en un 39% las pérdidas por comercializar gasolina.

3.     Es un error pensar que el contrabando se acabará con los actuales niveles de precios de la gasolina, al contrario, los incentivos están exactamente igual.

4.     No se puede pretender acabar con las distorsiones manteniendo los precios fijos en una economía inflacionaria como la venezolana. Se debe ir a un esquema de aumentos progresivos en el precio de la gasolina, que se ajusten periódicamente a una variable (por ejemplo la inflación mensual).

5.     No darle buena parte de los ingresos provenientes de la venta de gasolina a Pdvsa es una muy mala señal. Pdvsa tiene problemas en su flujo de caja, tanto en bolívares como en dólares, por lo que necesita de más ingresos. El aumento en el precio de la gasolina tendrá un bajo efecto en las finanzas de la estatal venezolana por ese lado.

6.     Si Pdvsa logra cambiar la matriz de consumo de gasolina en Venezuela, donde la gasolina de 91 octanos se beneficie de esta nueva estructura de costos, Pdvsa pudiera ahorrarse divisas al disminuir la importación de componentes para la elaboración de gasolina de 95 octanos.

 

lunes, 22 de febrero de 2016




La inflación que el BCV esconde

 

Se hace costumbre que luego del anuncio de medidas económicas por parte de Nicolás Maduro, el BCV publique cifras sobre la economía venezolana. La semana pasada no fue la excepción y por fin pudimos conocer la “realidad gubernamental” de nuestra economía para el año 2015.

A pesar de que ya tenemos los números finales de las principales variables macroeconómicas, los niveles de inflación y de actividad económica sorprendieron a muchos economistas, ya que lo publicado estuvo muy por debajo de lo esperado. En las próximas líneas nos centraremos en explicar qué creemos nosotros que pasó con la inflación. 

 
Cambios en las Ponderaciones

No hay dudas de que el BCV decidió cambiar las ponderaciones del Índice Nacional de Precios al Consumidor y lo más grave es que lo hizo sin avisarle ni mucho menos explicarle al país las razones para tal acción.

En el cuadro N°1 (Fuente BCV) presentamos el Índice Nacional de Precios al Consumidor de los años 2010 hasta 2015, con sus totales y la inflación desde 2011 hasta 2015. Todo según la metodología del BCV.

 
Cuadro N°1

 






¿Cómo se explica que el grupo Alimentos presente una inflación de 315% para el año 2015, represente más del 32% del INPC según el último esquema de peso por grupo y la inflación que informe el BCV sea de apenas 180,87%?, simplemente porque cambiaron las ponderaciones. Si utilizáramos las ponderaciones por grupo económico que usaba el BCV para medir la inflación desde al menos 2010, llegaríamos a una inflación en 2015 de 240,54%.

Pero el “retoque inflacionario” no se limita al año 2015, ya para 2014 la “fiesta” había empezado. Según nuestros cálculos, la inflación en ese año ha debido ser de 76,05% y no de 68,54% como reportó el BCV. Esta pequeña diferencia nos indica que los cambios en las mediciones las inició el BCV en el segundo semestre de ese año.

En el cuadro N°2 presentamos los números que debería haber publicado BCV desde 2010 hasta 2015. Vean como en 2014 y 2015 es donde se presentan las diferencias.

Cuadro N°2


 

 
 
 
¿Por qué lo hizo?, para lograr presentarle al país un nivel de inflación muy diferente (y por lo tanto menor). La inflación que debería haber publicado el BCV no es de 180,87%, sino 240.54%, una diferencia por demás bastante grande.  De un solo plumazo le rebajaron un cuarto a la inflación total.

¿Qué nuevas ponderaciones tenemos ahora?, es difícil sacar la cuenta cuando son 14 los grupos que componen el INPC (por lo tanto tendríamos 14 variables para llegar al resultado), sin embargo cuando tomamos las ponderaciones del año 1997 (año donde el BCV hizo todo un trabajo para cambiar la forma de medir la inflación), se llega a un resultado parecido al que publica el BCV para la inflación de 2015 (ajustando un poco más a la baja el grupo alimentos).

¿Qué críticas pudiéramos tener? En los últimos años la ponderación del grupo Alimentos había sido casi un tercio del INPC pero para 1997 esta era del 22.9%, por lo tanto tiene mucho sentido que el BCV buscando disminuir la inflación haya cambiado (disminuyendo) la ponderación de ese grupo.

¿Por qué ese grupo? 1- Porque es el grupo que más rápido están creciendo sus precios y 2- es el grupo con la ponderación más alta, por lo que cambios en él generarían una disminución inmediata e importante.

Ideas Finales

El gobierno le esconde al país la inflación real como una manera de tratar que la cifra no se hable en la calle. Esa estrategia es estéril, es ineficiente y deteriora la confianza en las instituciones aún más. 

Somos de los que piensa que al gobierno le hace mucho más daño esconder y maquillar cifras, que decir la verdad.

Ese maquillaje se intensificará en este 2016.

 

Luis Oliveros
@luisoliveros13
 
 

domingo, 21 de febrero de 2016


El precio “justo” del petróleo

El gobierno venezolano, de la mano de mediocres asesores, sigue sin entender que está ocurriendo en el mercado petrolero. Estos personajes lo convencieron primero que el shale oil no generaría mayor impacto en los precios (no aguantarían precios bajos, porque sus costos de producción son elevados), después que el “precio justo” del petróleo era un número de tres cifras y luego, casi al final y para tratar de enmendar las grandes metidas de pata, le hicieron creer al ingenuo Nicolás Maduro que viajando por el mundo a pedir reducción de producción iba a lograr algo.  Cada vez que el presidente venezolano inició una gira por países petroleros para “recuperar el precio”, el saldo fue una disminución del precio de entre 3% a 5%.

Uno de los grandes problemas del alarmante desconocimiento que sobre la economía tienen desde el gobierno es la creencia casi religiosa, que existe algo llamado “precio justo”, el cual por cierto, dependiendo de donde se quiera parar el gobierno, en el mercado interno para atacar al sector privado o como exportador de petróleo para pedir precios altos, tiene una formación muy diferente, casi pintoresca.  

Si del mercado interno se trata, al gobierno poco le importa que muchos empresarios estén trabajando a pérdidas con el establecimiento de controles de precios distorsionantes. Y si hay sectores que generan ganancias, entonces se les obliga a que esa tasa no supere un “justo” 30%. Adentro del país, el gobierno vende la idea que la especulación es mala y que los empresarios que hacen eso odian a la sociedad.

Toda esa lógica cambia radicalmente cuando el gobierno se pone la “gorra” de exportador de petróleo.

Con un costo de producción de $13/b (cifras del presidente de Pdvsa), el gobierno no se contenta con ganar el 30% que pide en Venezuela (unos $4/b), sino que apela a lo más salvaje del capitalismo para implorarle al mercado que le brinde un margen de ganancia 8 veces el costo. Interesante como en el mercado petrolero, el mismo gobierno se da cuenta que un margen de 30% no genera los recursos necesarios. Contradictoriamente un gobierno que se dice “profundamente socialista” trata de hacer un lobby internacional para que los países pobres e importadores de energía tengan una factura por ese concepto bastante abultada, lo que les resta oportunidades para disminuir la desigualdad económica en sus países o emprender políticas sociales.

La izquierda venezolana nunca entendió que destruir la formación de precios era nocivo para la salud financiera del país. Maduro y su séquito de “expertos petroleros” sigue aferrados a una ideología fracasada y lamentablemente le están costando muy caro al país.

El actual precio del petróleo en el mercado internacional es su precio de equilibrio. Hoy la formación del precio del crudo no tiene ningún componente de especulación ni volatilidad, varios modelos así lo demuestran, situación muy diferente a lo que ocurrió entre 1999 y 2004 y luego entre 2003 y 2014. Decir que el precio “justo” del petróleo es algún nivel por encima de $100, no solo es una gran mentira, también es una profunda demostración de un muy bajo nivel intelectual.

¿Qué el precio se recuperará y volverá a los niveles de $100?, en un mercado tan volátil eso es factible algún día, pero ese escenario no se ve cercano en los próximos 5 años. Mientras tanto pensemos que estamos en una situación (en el mercado petrolero) como la que vivimos a partir de 1986, donde el precio del petróleo se mantuvo bajo y con cierta estabilidad hasta 1999 (solo superó la barrera de los $20/b entre 1990 y 1991 por la guerra del Golfo).

Estas son unas muy malas noticias para Venezuela, donde el gobierno no solo no actúa de manera coherente ante la crisis, sino que sigue con el fetiche de rodearse del peor recurso humano posible para enfrentarla.

Luis Oliveros
@luisoliveros13